4.6.08

Hillary la Enigmática

Hace unos cuantos minutos se anunció que Hillary Clinton formalmente reconocerá su derrota ante Barak Obama el sábado y así terminará su fallido intento para obtener la candidatura demócrata a la presidencia. Enhorabuena. Realmente no tenía otra opción a estas alturas y más bien se espero hasta el último posible momento para retirarse de la contienda, incluso después de que los 50 estados más cuatro territorios votaron por sus candidatos de preferencia. No está del todo claro que ocurrió en el transcurso de hoy, probablemente no se sepa nunca lo que se dijo tras puertas cerradas, pero todo parece sugerir que varios líderes demócratas tuvieron que presionarla para que aceptase su derrota y se dejara de necedades. Ayer a esta misma hora, con todas la casillas cerradas y con una clarísima ventaja de Obama sobre ella, se negó a tomar una decisión. La pregunta es ¿por qué se espero hasta ahora para retirarse de la contienda y dejar que el telón caiga con aplausos y estilo? Cuatro teorías que andan flotando entre analistas:
1) Hillary la Rencorosa: Hillary estaba obstinada de que eventualmente las tendencias se revertirían y ella obtendría la candidatura luego de un episodio de epifanía política colectiva. Eso o sufre de algún tipo de síndrome de negación patológica de la realidad. Suena exagerado pero parece que es común entre políticos (y no solo de EEUU). También la guía un mezquino rencor que se niega entregar voluntariamente la batuta a Obama y alguien tuvo que arrebatárselo de sus manos para que sucediera. En breve, no era para obtener algo a futuro que decidió quedarse en la contienda sino por inconmesurable terquedad. Suena parecido al caso de un cierto político mexicano que se negó reconocer su derrota electoral en el 2006 no como estrategia para fortalecer a su partido o promover su carrera política a futuro sino porque padece de trastornos de personalidad y no puede deshacerse de su instinto político de nunca reconocer una derrota, menos aún si fue por errores propios. Maureen Dowd entre otras psicopolíticoterapeutas apoyan esta tesis.
2) Hillary la Arrogante: Hillary es bastante más inteligente y maquiavélica y piensa en el largo plazo. Sabía que no podía ganar la contienda desde hace varias semanas pero quiere por una parte colocarse como la víctima de varios atropellos cometidos contra ella (el contar a medias los votos de Florida y Michigan, las agresiones de una prensa obamifílica, la traición de tantos ex-clintonistas) y por otra parte presionar a Obama para que le ofrezca una enorme concesión: el puesto de vice-presidenta. El obligarlo a ofrecerle el puesto y luego rechazarlo sería un acto de suma arrogancia pero también de astucia: se colocaría por encima de él y conservaría su estatus como líder demócrata en el senado, sin ataduras al presidente en turno, republicano o demócrata. Esto para que a futuro, en el 2012 o 2016, sea una favorita y se pueda distanciar de todos los fracasos imputados a la presidencia de Obama, o si gana McCain, del fracaso electoral de los demócratas en el 2008. La víctima así se vuelve la salvación. Es común que esos papeles se inviertan en la política. Michael Tomasy entre otros futurólogos que creen en el lado oscuro de Hillary cree en esta posibilidad.
3) Hillary la Víctima: Hillary es víctima de una serie de graves errores estratégicos que ella y su equipo cometieron durante los 17 meses de la contienda. Durante mucho tiempo se creyó invencible y la candidata inevitable. Cuando era evidente de que no ganaría la contienda, continuó en su intento de conseguir la candidatura hasta el final no porque pensaba poder ganarla sino porque pensó factible conseguir la vice-presidencia. Hillary sabía que es un puesto envidiable para un aspirante a la presidencia y un lugar para brillar sin arriesgar demasiado. Pero para ese momento se le había pasado la mano en echarle lodo a su oponente (cosa que hizo casi hasta el final) y desacreditarlo y él, con toda razón, la ve como una rival y prefiere ahora escoger a alguien un poco más amistoso como vice-presidente (y que no lo opaque durante su presidencia). Los analistas del Washington Post entre muchos otros críticos de Hillary estan convencidos de que este fue el caso.
4) Hillary la Estratega Oportunista: Probablemente Hillary sabía que no podía ganar la contienda pero sabía que si se quedaba lo suficiente podría crear una presión extraordinaria para que Obama la eligiera como vice-presidente. No porque realmente fuese su primera opción sino porque quiere evitar a toda costa perder los votos de Hillary y dividir aún más su partido. Marc Ambinder llega a esta conclusión, al igual que muchos otros aspirantes a estrategas políticos.
Mi opinión: Aunque diametralmente opuestas en cuanto a la motivación de Hillary en permanecer en la contienda y en el tipo de político que ella es, cualquiera de las cuatro teorías suena bastante convincentes a mi parecer. Pero creo que hay un atajo para encontrar cuál es la más acertada. Dos preguntas
¿Quiere Hillary ser vice-presidenta?
Estoy convencido que no. Hillary ya fue vicepresidente (de facto) cuando su esposo vivió en la Casa Blanca. El puesto le queda chico. Cualquier posición que no sea la de presidente le queda chico. Y mejor ser líder en el senado como ya lo es que tomar ese puesto tan aburrido y ambivalente.
¿Quiere Obama ofrecerle la Vice-presidencia?
No quiere, pero creo que esta dispuesto a hacerlo. Aunque a primera vista podría parecer una opción atractiva para cooptar los votos hilarianos a largo plazo sería un enorme error. Sería una distracción, una rival, una contradicción a todo lo que ha prometido. Y lo sabe.
Entonces ¿Hillary es Hillary la Rencorosa? No me satisface esa explicación del todo. Mejor decir que Hillary es enigmática y ya.

1 comentario:

Anónimo dijo...

COMO QUIEN DICE , SENCILLAMENTE HILARY ES MUJER!